Nos dicen que hay buenas noticias, que el paro baja; pero nada dicen de las personas que tienen que seguir exiliándose en busca de un futuro que aquí se nos niega; o de las millones de personas que sobreviven y malviven con contratos precarios. Puede que el desempleo haya bajado levemente, pero eso no quiere decir que el problema esté resuelto: Millones de familias no tienen ya ningún tipo de prestación o subsidio, ¿es eso mejorar? ¿son datos para alegrarse?
Y mientras, ajeno a todo, el FMI nos receta, como si de un doctor matasanos se tratara, más IVA, bajar el impuesto de sociedades y ligar los salarios a la productividad. Basta ya de hablar de productividad, de decir que son las empresas quienes arriesgan y ponen capital, obviando qeu las persaons que trabajamos ponemos también nuestro capital: nuestro propio esfuerzo, y nuestro tiempo.
Pero sobre todo, basta ya de que organismos que no son democráticos decidan, presionen y tomen mediadas sobre y contra una ciudadanía que no los ha votado.
El pasado 25 de mayo avisamos: no queremos partidos que gobiernan para el mercado en vez de para las personas. No queremos estas medidas que la troika nos impone. No queremos casta corrupta y antidemócrata. Queremos que se salve a las personas, no a los bancos o a las autopistas.
Lo hemos dicho y ya se inqueitan. Tienen miedo. Tanto, que descalifican, que dicen que vamos a vivir en una democracia bolivariana, como si no prefiriéramos eso a una democracia de gas natural. Tanto miedo están sintiendo que el rey abdica para simular un cambio.
Aún nos e ha enterado de que nos da igual que abdique, lo que queremos es una democracia verdadera, y eso no pasa por una monarquía, sino por una república. Desde aquí, en este nuevo #LunesAlSol, pedimos un referendum. Un proceso constituyente en el que el pueblo decida.
Hoy volvemos a gritar ¡A por la tercera! ¡Viva La República!
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